Otro de los regalos hand-made de estas Navidades: unas manoplas de cocina para mi abuela favorita. Sé que es un proyecto súper simple pero a ella le hizo muchísima ilusión que lo hubiera cosido yo misma y me dijo que no se atrevería a usarlas de tan bonitas que eran (¿Verdad que vuestras abuelas también son las mejores del mundo?).

El proceso no podría resultar más senzillo y también sirve para hacer manteles individuales, sólo hace falta cambiar las medidas.

Necesitamos:

– telas de algodón (¡Atención! Las telas sintéticas se podrían quemar con el calor de las sartenes o cacerolas)

– cinta al bies comprada o hecha en casa

– relleno. Lo siento pero no se como se llama, el mío lo compré en Fildor y a la dependienta le pedí: «ese tejido acolchado que sirve para hacer edredones y cosas por el estilo» y me entendió perfectamente. Este material tiene dos tejidos exteriores y luego está rellenado de fibra, es fácil de cortar y de trabajar con él.

Se llama guata, una amiga de Munich nos ha echado un cable ;) ¡Gracias!

Confección:

1. Hacemos un «sandwich» de tela/tejido de relleno/tela. Fijamos el conjunto con alfileres (cuantos más mejor. Por cierto, si alguien sabe hacer patchwork es mejor que no siga leyendo porque le va a parecer todo una verdadera chapuza).

2. En este paso de trata de fijar con un pespunte los materiales. Yo hice lineas paralelas aprovechando que una de las telas tenía rayas. Se pueden hacer cuadrados, rombos, …

3. El aspecto de la manopla después de coser los pespuntes paralelos es este.4. Vamos a cortar los márgenes para que queden pulidos (una cutter rotatorio va de maravilla).

5. Ahora ya empieza a parecer una manopla ¿Verdad?6. Coseremos la cinta al bies alrededor y al final dejaremos unos 6 cm. de cinta para hacer un pequeño lacito para colgarlo.